En la habitaciòn pasan cosas... (y en otras partes de la casa tambièn)

Es cierto que el titulo tiene doble sentido. Cuando lo lei, seguido del comentario de Tego de los rios, no pude parar de reir.
Mientras todos estaban en la habitación yo me encontraba sentada en el balcón, en una esquina, detrás de las cortinas, donde nadie me ve, pensando, tal vez en irme de allí. Todos me buscaban pero no respondia a los llamados. Necesitaba aire limpio para secar los restros de lagrimas que habia derramado por estos meses de injusticia interna. Nadie entiende, que por momentos "la soledad es la mejor amiga de los poetas".
Recordaba momentos en fechas iguales a esta, donde la vida era tan bella como no pensaba, y como marzo y los siguientes meses cambiarian las cosas. Estoy ausente. Si me ves a los ojos veras que lejos, muy lejos te irás. Decidi, entre sollozos, comenzar a escribir, pero esta vez para mi. No encontraba formas ni colores extraños y mi paladar muerto me pedia por mas sabores, mas ritmo, mas "chispas". Una vocesita interna gritaba: "nena vas a explotar!!, vive, que este cuerpo es prestado!"...meti la cabeza dentro de mi como Rasputìn verciòn Anastacia de Disney... "ay callate que solo sabes recordarme cuanto durare en esta vida!".

Tiempo antes de estar aqui, sentada en el gabetero de la habitación, donde de reojo observaba mi rostro en el espejo, Lacxos me preguntó que qué pasaba, y sin muchos rodeos le respondi: "necesito tiempo, necesito ausentarme del mundo para que este no me ausente a mi". En su rostro vi un gesto de desaprovación, pero entendia, que con tantos obstaculos debia descanzar. No se explicaba como mis letras se habian agotado de la nada, no entendia por qué tendria que irme.
"Me ire Lacxos, pero no le digas a nadie por favor"-y sin decir nada camine por el pasillo pero otra vez maquinando decidi salir al balcòn, y aun estoy aqui sentada.

Siento que la puerta de vidrio se mueve, y unos dedos se asoman temerosos por el cristal de vista externa. -Belle que haces aqui?. Era Darkness, quien se sentò a mi lado a observar la tarde caer con el sol a nuentras espaldas. -No se lo que tienes, pero se que estaras mejor-dijo con voz bien suave, intentando tal vez con sus palabras alivianar la carga de mis penas. Su frase terminò de sacar la ultima làgrima que me quedaba en el ojo izquierdo.
-Estare bien, es solo que me falta tiempo, el cual pasa lento para algunas cosas. Todos tenemos historias amigo mio, pero no todos podemos con ellas. Me miro impresionado.... como diciendome con los ojos ¿quien dice que tu no puedes!? y fue cuando continuò con un discurso que solo el mismo puede repetir...
(continuarà)...